Este dicho significa que la gente es como es y el que tiene malas intenciones las sigue teniendo. Es decir, que es muy raro cambiar con el tiempo.
Algún caso ha habido, especialmente entre los Santos. Sin embargo no conviene confiar en alguien que ya te la ha jugado en otras ocasiones.
Más sobre Gaza: https://www.cesarvidal.tv/videos/haaretz-destapa-asesinatos-de-civiles-por-el-ejercito-israeli-en-gaza-30-06-25
Quien logra cambiar fue porque tuvo que aprender la lección por castigo o desengaño, sino siguen siempre siendo los mismos, un abrazo Susana!
ResponderEliminarSe aprende por las malas. Un beso
EliminarTodos tenemos nuestras manías y con el paso de los años no se suavizan, al contrario. Es más poderoso que nosotros.
ResponderEliminarUn saludo
Cada cual es como es. Un beso
EliminarUno cambia luego de las traiciones. Te mando un beso.
ResponderEliminarAprende a alejarse. Un beso
EliminarUna mala persona es casi imposible de que cambie y cuando hace daño jamás pedirá perdón. Besicos
ResponderEliminarEso pienso yo por experiencia. Un beso
EliminarQue tal, Susana!
ResponderEliminarla sabiduria popular no falla… a veces uno quiere creer en los cambios, pero la naturaleza profunda suele imponerse. Mejor andarse con ojo.
Un beso grande y feliz fin de semana.
El fondo permanece. Igualmente
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