Cada tres meses aproximadamente, cuatro veces al año, mi marido y yo cogemos carretera y nos vamos a San Sebastián de Garabandal. Un pueblecito cántabro perdido en las montañas. Allí existe un lugar donde la Virgen se apareció a cuatro niñas en los años sesenta del pasado siglo.
El pueblo no ha cambiado casi nada. Ni siquiera tiene supermercado. La gente sigue viviendo de la ganadería. La razón es que el Obispo no quiso aprobar las apariciones, porque en ellas se criticaba a la iglesia. Tres niñas se fueron a vivir a América. Una ha regresado y una ha muerto. Otra vive en Asturias.
Yo voy allí porque se respira una paz especial y casi todo lo que he pedido a María me lo ha concedido. Además la Virgen habló de un aviso, un milagro y un castigo, si no nos arrepentíamos. Por las fechas debe estar a punto de suceder. No me importa lo que diga el cardenal Tucho. Para mí Garabandal es el hogar de la Virgen.
Sobre Trump: https://cesarvidal.com/la-voz/editorial/editorial-la-satanizacion-de-donald-trump-27-09-24
Gracias, Susana, y tomo buena nota de este pueblo para mi próxima visita a Cantabria, ya que un pueblo que ni tiene supermercado, dice mucho y bueno de la paz que se tiene que respirar allí.
ResponderEliminarEn esa época de la aparición de la Virgen, fueron muchas las que la iglesia no las validó, y creo que fue por la multitud de apariciones que hubo donde los protagonistas siempre eran tres o cuatro niñas, igual que sucedió a finales del siglo XIX y principios del siglo XX, donde la mayoría de ellas eran encontradas por pastorcillos, en una cueva, en un manantial, o entre unas zarzas.
Y valoro mucho esa inquebrantable Fe que tienes sobre esa aparición, en Garabandal.
Un cordial saludo.
Està casi igual que entonces, sal que ahora tiene agua corriente y carretera asfaltada. Un beso
EliminarLa fe es una invalorable compañía, un abrazo Susana!
ResponderEliminarEspero que ahora no se haga famoso el lugar. Un beso
EliminarHay que ser fiel a nuestra creencias, así que sigue creyendo con tanta ilusión y ternura como lo haces, es admirable.
ResponderEliminarMil besos.
Gracias. Un beso
EliminarTiene algo que ver con lo del accidente de los andes , uno de ños supervivientes ha ido varias veces, según ha co todo alguna vez iker Jiménez en su programa
ResponderEliminarAbrazooo
Sus madres rezaban a la Virgen de Garabandal. Un beso
Eliminar¡Hola! Conozco la historia, y la verdad me encantaría ir ahí porque me parece un sitio precioso. Besos :)
ResponderEliminarSí lo es. La Virgen la tengo en el lateral del bl8g. Un beso
EliminarPaso por este blog el cual me ha gustado. Tengo una gran devoción a La santisima Virgen Maria. Confio siempre en ella. Gracias por traerla hasta quí. Un abrazo,
ResponderEliminarGracias por tu visita. Un beso
EliminarLa Virgen siempre hace cosas maravillosas. Yo he tenido algunas experiencias con ella y me dio la salud.
ResponderEliminarUn saludo
Yo también la he sentido cerca. Un beso
EliminarQué curioso lo que nos cuentas hoy, ya vi la película y documentales sobre Garabandal. Supongo que debe ser un lugar hermoso hoy día. Besos
ResponderEliminarEstà en la ladera de un monte. Un beso
EliminarUn buen lugar para relajarse.Besicos
ResponderEliminarDesde luego. Un beso
EliminarMe gustaría conocerlo. Te mando un beso.
ResponderEliminarEstà en Cantabria. Un beso
EliminarNo conocía el lugar, Susana, por eso lo he buscado en Google. Es precioso.
ResponderEliminarBesos.
Es de otra època. Un beso
EliminarGreat blog
ResponderEliminarThank you
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