HISPANIDAD: El orgullo de la historia real.
Mucho se escribe en estos días a cuenta de las declaraciones del Papa Francisco sobre la actuación de la Iglesia en México durante los Siglos del descubrimiento de América. Es cierto que hubo abusos, pero no es menos cierto que fueron abusos «no organizados», es decir, abusos individuales por parte de individuos, de la Iglesia o Laicos, que desobedecían las normas impuestas por la propia Iglesia o por el Estado Español.
Precisamente por esto ni el Estado Español ni la Iglesia católica deben pedir perdón «formalmente» por nada, pues a diferencia de otros estados como Inglaterra, Holanda, Francia… que si que diseñaron todo un sistema de explotación, sometimiento, esclavitud y exterminio en las tierras por ellos conquistadas, España, movida fundamentalmente por el espíritu Evangelizador de Isabel La Católica, promulgó y conformó en los primeros años del Siglo XVI las bases de lo que hoy se conoce como «Derecho Internacional» y, por supuesto, de lo que, 400 años más tarde, la ONU vino a declarar como «Derechos Humanos» con «las nuevas leyes de indias».

Así, por si algunos lo han olvidado, San Juan Pablo II en un discurso del 14 de mayo de 1992 señaló:
“Ante los nuevos horizontes que se abrieron el 12 de octubre de
1492, la Iglesia, fiel al mandato recibido de su divino Fundador (Cf. Mt
28, 19), sintió el deber perentorio de implantar la Cruz de Cristo en
las nuevas tierras y de predicar el Mensaje evangélico a sus moradores.
Esto, lejos de ser una opción aventurada o un cálculo de conveniencia,
fue la razón del comienzo y desarrollo de la Evangelización del Nuevo
Mundo”.
“Ciertamente, en esa Evangelización, como en toda obra humana,
hubo aciertos y desatinos, «luces y sombras», pero «más luces que
sombras» (Cf. Carta Apostólica Los Caminos del Evangelio, 8), a juzgar
por los frutos que encontramos allí después de quinientos años: una
Iglesia viva y dinámica que representa hoy una porción relevante de la
Iglesia universal. Lo que celebramos este año es precisamente el
nacimiento de esta espléndida realidad: la llegada de la fe a través de
la proclamación y difusión del Mensaje evangélico en el Continente”.
“Y lo celebramos « en el sentido más profundo y teológico del
término: como se celebra a Jesucristo (…) el primero y más grande
Evangelizador, ya que El mismo es el ‘Evangelio de Dios’»”.
Sin muchos los motivos para estar orgullosos de la gran realidad que hoy en día, 500 años después, constituye Hispanoamérica, y esperamos poder seguir detallándolos en los próximos días.
https://cristianosendemocracia.com/2021/10/04/hispanidad-el-orgullo-de-la-historia-real/?fbclid=IwAR3tB4mxwjq3EDO-zNv_DQRdsR-8_IVtYv5YyfNFZdTyJCccPgjzmDpiD4w
A mí me parece de lo más ridículo juzgar los hechos del pasado con la visión del presente, y ni la Iglesia Católica ni el Estado tienen que pedir perdón por algo que se hizo hace 500 años. ¿Tendríamos que pedir perdón nosotros por los errores cometidos por nuestros abuelos? Evidentemente no, qué culpa vamos a tener. En cuanto al personaje de la reina Isabel, me parece que es uno de los más grandes que ha tenido la Historia de España. Es una mujer que admiro muchísimo y que se adelantó en muchas cuestiones a su tiempo. Hay mucha gente que habla y habla sin saber. La mayoría de los que viven en países latinos, llevan sangre española en sus venas y no entiendo por qué ese rechazo hacia lo hispano
ResponderEliminarFeliz día, Susana
Lareina Isabel fue la gran protagonista de la época. Yo creo que nos aprecian más de lo que parece. Un beso
EliminarUn artículo muy interesante Susana. Besos :D
ResponderEliminarGracias. Un beso
EliminarCon todas las guerras e invasiones que ha habido a lo largo de la historia de la humanidad en todos los rincones de nuestro planeta no se libraría nadie de pedir perdón. Son cosas de otras épocas con otras mentalidades y hay que buscar siempre la parte positiva de cada invasión de cualquier pais o territorio de la geografía de la Tierra, que la hay: enriquecimiento con otras culturas,conocimientos y avances nuevos en todos los aspectos, alimentos, construcciones de todo tipo, evangelización etc. etc.Besicos
ResponderEliminarNosotros no culpamos a Roma. Más bien le damos las gracias. Un beso
EliminarHe tomado la misma imagen para la entrada de hoy :)
ResponderEliminarTodos los 12 de octubre se repite el mismo ritual de la vergüenza, esto es, la vergüenza que producen a todos los españoles de bien esa cohorte de personajes que reniegan y calumnian contra la historia de España y contra la mismísima faz de los hechos. En todos los eventos humanos hay luces y sombras, cierto, pero no es menos cierto que los españoles bajo el reinado de aquella gran mujer que fue Isabel la Católica emprendimos una epopeya, cruzando el ancho mar, que llevó la Fe en Cristo, una lengua, una cultura y una civilización de la que se beneficiaron ampliamente los nativos de aquellos lugares. Nativos, por otra parte, que vivían, hasta nuestra llegada, bajo el yugo de un pueblo dominador, el azteca, que tenía por costumbre ofrecer sacrificios humanos a sus diosecillos emplumados. Es más, a los expedicionarios que cruzaron el mar, cortos en número pues aquellos navíos no eran precisamente ciudades flotantes, se les unieron miles de nativos que vieron en aquellos visitantes a unos libertadores de los altares de piedra aztecas, los puñales rituales y lindezas por el estilo. No, hoy es un día para sentir un humilde orgullo por una epopeya que cambió el mundo; una gesta que llevó a Cristo a quienes no lo conocían; un acontecimiento que jamás perdonaron ni anglos ni holandeses y por eso mismo fueron capaces de crear la famosa leyenda negra que, hoy, utilizan sin pudor y llenos de ignorancia otros españoles que preferirían ser esquimales, o quizá afganos bajo el poder de la Sharía.
Saludos cordiales.
Hay gente que no se merece ser español, porque son incapaces de valorar lo que supone. Un beso
EliminarConquistamos América en nombre de la Iglesia y así nos lo agradecen.
ResponderEliminarVuelvo de estar unos días en casa de mi hija, terminó y presentó su tesis Aleluya! Nos abrazamos cuando le puso ENVIAR!!!! Yo sigo festejando el 12 de Octubre como el Día de la Raza, como cuando iba al colegio y era un festejo, las modernidades no tienen que ver con la historia en el momento en que se desarrollaron los hechos. El domingo festejamos el día de la madre, ahora se dice el día de la familia, bueno, yo festejo como MADRE!!! Un abrazo Susana!
ResponderEliminarMuchas felicidades por tu hija y por lo demás. Un beso
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